Ciclo de cine
Clásicos del cine latinoamericano
Disponible
Oct
2024
Nov
2024
Este ciclo reúne películas que han capturado momentos destacados de la historia y la cultura latinoamericanas, han expresado las inquietudes y obsesiones de sus sociedades y han innovado en la forma de narrar. A través de ellas, se aprecia la contribución a la identidad cinematográfica regional, y su impacto a los públicos quienes también les han otorgado este rótulo de “clásicos”.
Este ciclo reúne películas que han capturado momentos destacados de la historia y la cultura latinoamericanas, han expresado las inquietudes y obsesiones de sus sociedades y han innovado en la forma de narrar. A través de ellas, se aprecia la contribución a la identidad cinematográfica regional, y su impacto a los públicos quienes también les han otorgado este rótulo de “clásicos”.
Mi Socio (1982, Bolivia), dirigida por Paolo Agazzi, ofrece un viaje a través de las diversas geografías y culturas bolivianas. La relación entre Vito, un camionero colla, y Brillo, un joven lustrabotas camba, simboliza la posibilidad de entendimiento y unión en un país con marcadas divisiones. La película se convirtió en un referente del cine boliviano al abordar de manera empática las diferencias culturales y promover la integración nacional.
En La pasión según Berenice (1976, México), de Jaime Humberto Hermosillo, se presenta a Berenice, una mujer que desafía las convenciones de una sociedad conservadora. Su búsqueda de identidad y libertad personal cuestiona las estructuras que limitan la expresión femenina. Esta obra es un hito en el cine mexicano por su audaz exploración de la autonomía de la mujer y su crítica a las normas sociales restrictivas.
Días de Santiago (2004, Perú), dirigida por Josué Méndez, retrata la difícil reintegración de un excombatiente en una Lima que le resulta extraña. Santiago enfrenta la alienación y el peso de sus experiencias pasadas, reflejando las cicatrices invisibles que deja la guerra. La película destaca por su honesto retrato de la lucha interna y por visibilizar temas como el trauma y la desatención a los veteranos, aportando una perspectiva fresca al cine peruano.
Con Anina (2014, Uruguay), de Alfredo Soderguit, nos adentramos en el mundo interior de una niña que cuestiona su entorno y a sí misma. A través de la animación, el filme aborda la identidad y las relaciones interpersonales desde una perspectiva infantil que conecta con diversas generaciones. Esta película abrió nuevos caminos en el cine de animación latinoamericano, demostrando el potencial del género para explorar temas profundos con creatividad y sensibilidad.
Finalmente, Luz: The Flower of Evil (2019, Colombia), dirigida por Juan Diego Escobar Alzate, transporta al espectador a una comunidad aislada dominada por el fanatismo religioso. Combinando elementos del western y el terror, la película cuestiona las dinámicas de poder y la fe ciega, expandiendo los límites del cine de género en América Latina. Su enfoque innovador y su crítica a las estructuras opresivas la han consolidado como una obra significativa en el panorama cinematográfico contemporáneo.